15 julio 2012

Una mente no tan maravillosa

Uno de los Oscars a la mejor película más discutidos de los últimos tiempos es el de "Una mente maravillosa", que derrotó en 2002 a "La comunidad del anillo", "Moulin Rouge" o "Gosford Park". La cinta, dirigida por Ron Howard y protagonizada por Russell Crowe y Jennifer Connelly, contaba las peripecias del matemático John Nash, cuya mente es realmente brillante pero, al mismo tiempo, sufre de esquizofrenia. La sombra de esa película es una de las muchas que se nota sobrevolando "Perception", la nueva serie de Eric McCormack para TNT, en la que es un neurólogo muy prestigioso que da clases en una universidad en Chicago, y que también es esquizofrénico (aunque, en el piloto, en ningún momento se identifica su dolencia como tal). El doctor Daniel Pierce es muy bueno resolviendo puzzles, está peor dotado para las relaciones sociales y tiene un ayudante que le ayuda a saber si está tienendo algún tipo de alucinación. Todo remite inevitablemente a "Una mente maravillosa" (hasta a la doctora Brennan, de vez en cuando), y depende de otros factores, más que de la originalidad de la propuesta, que la serie vaya a ir a alguna parte.

Porque original, lo que se dice original, no es. Pierce es reclutado por una antigua alumna, ahora agente del FBI, para que la ayude a resolver un asesinato, y entre los dos tenemos la dinámica, vista ya mil veces, del hombre excéntrico y peculiar y la mujer seria y profesional. De hecho, la agente Moretti deja unos cuantos dejà vús a Kate Beckett al principio de "Castle", cuando era demasiado estirada y hasta sosa. El punto de vista de Pierce es que las fuerzas del orden no suelen tratar correctamente a los sospechosos con trastornos mentales, y entre los diversos discursos que suelta tenemos hasta una representación del ejemplo de los afásicos como algo así como detectores de mentiras humanos que cuenta Oliver Saks en "El hombre que confundió a su mujer con un sombrero" (sólo que cambiando un discurso de Ronald Reagan por otro de George W. Bush).

"Perception" no es un soplo de aire fresco a los procedimentales de pareja formada por el serio y el "raro", y su único valos puede estar en que se vaya generando un retrato que nos interese de Pierce y Moretti. Sí, él tiener varios aspectos, a causa de su enfermedad, que pueden picar nuestra curiosidad, pero tampoco llegan en el piloto a presentarse como de verdad intrigantes, y ya hemos comentado que Moretti es bastante monocroma. En estas series, son los personajes los que tienen la capacidad de enganchar o no al espectador y, de momento, a "Perception" le falta lo que le sobra a "Rizzoli & Isles", otro procedimental muy genérico y más bien del montón que sólo destaca por la enorme química entre sus dos protagonistas.

Música de la semana: Con unos cuantos meses de retraso estoy viendo la segunda temporada de "Shameless", una temporada que igual por estar ambientada en verano se nota un poco más acelerada, como si dijéramos (pero muy divertida). En uno de esos primeros episodios, Debbie se obsesiona con la muerte y, de todas las canciones que podría escuchar, le da por "#1 Crush", la aportación de Garbage a la banda sonora de "Romeo y Julieta", de Baz Luhrmann.

No hay comentarios: