31 marzo 2008

Tunguska y los muñecos

1.- Nuevos daños colaterales, y asociaciones de ideas peregrinas, derivados de mi trabajo en el Mundo Real; en junio se cumplen 100 años del evento de Tunguska, la explosión en la atmósfera, a cierta altura del suelo, de un meteorito cuya naturaleza aún se desconoce, y que dejó como recuerdo no un cráter, sino una vasta extensión circular de árboles caídos. El nombre de esa región de Siberia también dio título a un capítulo de la cuarta temporada de "Expediente X", en el que reaparecía el celebérrimo Cáncer Negro y Mulder y Krycek seguían su pista hasta Rusia. Aquí entraban en juego unos experimentos de científicos rusos, un grupo de hombres mancos y, si no recuerdo mal, Mulder como conejillo de Indias. Y esto me lleva a este estupendo poster de la segunda película protagonizada por Sculder.

2.- Sin salirnos de la ciencia ficción, Popular Mechanics ha elegido las 10 películas del género más proféticas (que no las mejores, cuidado). Utilizan como excusa la muerte de Arthur C. Clarke y colocan en la lista "2001. Una odisea del espacio", que adelantó el turismo espacial; "Cortocircuito" y los robots militares autónomos; "Cuando el destino nos alcance" profetizó el cambio climático creado por la superpoblación y las actividades humanas; "Blade Runner" adelantó la evolución del desarrollo de las ciudades; "Perseguido" y los concursos reality, además de adelantarse dos años al estreno de "Gladiadores americanos"; "Con destino a la Luna" narró en 1950 un viaje tripulado a la Luna siguiendo casi al pie de la letra la física de Newton y todas las complicaciones derivadas de los viajes espaciales; "El show de Truman" y los realities más extremos que "Gran Hermano"; "Mad Max" se centraba en las guerras derivadas por la escasez de recursos, sobre todo de petróleo; "Minority Report" y la tecnología de pantallas táctiles (iPhone, estoy mirándote a tí) y "Gattaca" y los perfiles genéticos y la bioingenería.

3.- Empieza a picarme mucho la curiosidad por "Dollhouse", el nuevo proyecto televisivo de Joss Whedon (que ya tiene una web de fans antes de que se haya empezado a rodar nada). Poco se sabe de él, aparte de que sus protagonistas son unas personas a las que se les implantan "paquetes de personalidad" para que realicen ciertas misiones y, después, son "formateados" y guardados en un almacén. Su protagonista femenina, Eliza Dushku, se conocía hace tiempo, y ahora ya sabemos que la acompañarán Tahmoh Pennikett (la "torre" del reparto de "Galáctica") y otros tres actores desconocidos hasta ahora. El estreno está previsto, en Fox, para la próxima temporada, no se sabe si en otoño o en mid-season.

4.- Acabo de ver en La Sexta una promoción de "Bones" realmente simpática (y con su punto friki). No consigo encontrarla por ningún sitio, pero sólo diré que utiliza como banda sonora el estribillo de "Huesos", una canción que Pedro Guerra escribió sobre el trabajo desempeñado por las asociaciones de recuperación de la memoria histórica. Éste otro anuncio de la serie, en el canal británico Sky, está muy inspirado (y recuerda mucho a cierta promoción de "Aída").

30 marzo 2008

50 series

Hacer listas y apostar sobre cualquier cosa (literalmente cualquier cosa) deben ser de los pasatiempos preferidos de los ingleses. La revista de cine "Empire", repleta de unos frikis cinéfilos de lo más divertido, no deja pasar un mes sin confeccionar alguna lista de sus películas de terror favoritas, de los mejores momentos de la saga de "La guerra de las galaxias" o de los robots más carismáticos de la ciencia ficción, y la última que se han sacado de la manga compila las 50 mejores series de televisión de la historia, votadas por los lectores de la revista. La lista es discutible, por supuesto, pero no deja de ser curiosa, sobre todo por los comentarios de los redactores explicando por qué esa serie está incluida en la lista, cuál es el mejor episodio a su juicio y alguna curiosidad sobre ella.

La que cierra la lista, en el puesto 50, es "A través del tiempo", cuyo protagonista viajaba en el tiempo adoptando cada vez el cuerpo de una persona diferente. Vi pocos capítulos de esta serie durante un verano que pasé en Irlanda, y guardo de ellos un buen recuerdo. El "socio" del protagonista, un Scott Bakula que después protagonizaría "Star Trek: Enterprise", era Dean Stockwell, el hermano Cavil de los cylones de "Galáctica". Por encima de ella está la primera temporada de "Prison Break", cuyo ritmo incansable y la fuerza de su escenario (y un gran malvado como T-Bag) hacían que te olvidaras de cualquier inconsistencia y sólo quisieras seguir viendo capítulos para ver cómo se desarrollaba todo. Según la revista, los dos episodios del motín organizado por T-Bag en la cárcel son los mejores, y con todo merecimiento. Ya sabemos que, después, se han despeñado sin remedio. También está una de las favoritas macguffineras, "Verónica Mars", en el 48, una serie con uno de los mejores personajes centrales de la televisión yanqui reciente, hasta el punto de que terminó canibalizándola. Irónica, obstinada, divertida, resuelta, a veces un poco cruel y también vulnerable, Verónica era mucha Verónica. Para "Empire", el mejor capítulo es "Not pictured", el final de la segunda temporada, y para mí hay tantos, que no me veo capaz de escoger.

Hay hasta tres series de la franquicia "Star Trek" en la lista ("Espacio Profundo 9", la serie original y "La nueva generación"), pero yo casi no las he visto, así que no entraré a comentar nada de ellas, y también andan por aquí "Sexo en Nueva York" y unverdadero clásico contemporáneo como "Hermanos de sangre"."Life on Mars", uno de mis descubrimientos del año pasado, es el número 40, y "Monty Python's Flying Circus", inesperado como la Inquisición española, el 39 (Michael Palin explica en esta entrevista cómo llegaron a ese extraño nombre. Incluso querían llamarlo "Un caballo, un cubo y una cuchara", o algo así). Para los fans de "Alias", vuestra serie favorita es la 35ª, y demos gracias a J.J. Abrams por descubrirnos a Jennifer Garner (ved "Juno" y comprenderéis por qué). Un puesto por encima está una de mis favoritas, "Frasier". Me lo pasaba en grande incluso con Eddie, el perro, y recuerdo aquel capítulo en el que Eddie está deprimido y todos hacen terapia de grupo con él.

"CSI" es la 33, con el episodio calificado como mejor es "Grave danger", el final de la quinta temporada dirigido por Quentin Tarantino. El lado friki de Grissom y sus compañeros es mi debilidad, qué le vamos a hacer (gran momento aquél en el que Grissom y el forense discuten el mejor método para hervir una cabeza humana y dejar limpio el cráneo). "Deadwood", que yo tengo a medias, es la 31, y "Dexter" la 30. Merece estar incluida aunque sólo sea por el sensacional, y sutil, trabajo de Michael C. Hall. Otra de mis favoritas, "Urgencias", es la 29, con su peculiar sentido del humor y su ritmo, y yo siempre diré que eso de que te caiga un helicóptero encima en la puerta del hospital es una de las mejores muertes de la historia de la televisión. La 28ª es una vieja comedia británica políticamente incorrecta y muy divertida que yo descubrí también aquel verano que estuve en Irlanda, "Fawlty Towers". Hay que verla para creerla.

Igual que "Futurama", de la que sólo diré que Bender, que roba la serie limpiamente, lleva el nombre de John Bender, de "El club de los cinco". Y confieso que tengo debilidad por Mordisquitos. El agente Cooper y su obsesión por las tartas era sólo una de las peculiaridades de "Twin Peaks", en el puesto 24, y en el 16 está "Doctor Who" y su nueva encarnación, con la que yo disfruto enormemente (gran incorporación la de Martha Jones en la tercera temporada). No comprendo que "Héroes" esté tan arriba, en el 15, pero tampoco vamos a ahondar en la herida. Por lo menos, no supera a "Firefly", que sólo con 14 capítulos hizo lo que pocas series han conseguido en cinco temporadas. Y qué decir de la 13ª, "Galáctica". "Empire" sitúa como mejor episodio "Pegasus" y las dos partes de "Resurrection ship", a mitad de la segunda temporada. El rescate de Nueva Caprica tampoco estuvo mal. "Expediente X" es la 9ª, con ese divertidísimo "Jose Chung's From outer space" como mejor exponente, y "The Wire", que tengo lista y a punto, la 8ª. "Friends" y el episodio del baile de promoción está en el puesto 7 (es la primera vez que aparece Fat Monica). "Perdidos" anda en el 5º puesto, y las dos primeras son "Buffy" y "los Simpson". Sí, amigos, Peter Griffin siempre será una mala copia de Homer.

Música de la semana: Hay un par de promociones por ahí que me han hecho bastante gracia. Una es la del canal británico Sky Sports que, dado que ninguna selección de las islas está clasificada para la próxima Eurocopa de fútbol, que se disputa este verano, ha decidido apoyar a España. La mezcla de tópicos de todo tipo es realmente curiosa, y el final es lo mejor. La segunda promoción es de Cuatro, anunciando los nuevos capítulos de "Cuestión de sexo" al estilo del vídeo de "Amo a Laura" y aludiendo a algunas de las quejas más comunes de las asociaciones de televidentes. Al final de esas promociones se puede escuchar una canción de Morcheeba, "Be yourself", antes de que cambiaran un par de veces de vocalista (para mi gusto, a peor).

Actualización: Los fans yanquis de "Galáctica" andan revolucionados con el DVD de la tercera temporada, lleno de extras, escenas eliminadas, comentarios... Entre ellos, esta escena eliminada de "A day in the life" es realmente simpática porque tenemos a Gaeta y Dualla cotilleando un poco sobre el gran número de visitas que Roslin le hace a Adama. Gran frase de Dee cuando dice "hay ciertas cosas que no necesito en mi cabeza".

29 marzo 2008

Desde el Danubio

Ya veo que esos jovenzuelos actores antes de hacerse famosos no han tenido secretos para vosotros, ¿eh? Efectivamente, el primero era Lee Pace, protagonista de "Pushing Daisies", que empezó a hacerse notar en el circuito indie con "Soldier's girl", donde era un transexual que actuaba en clubes y de la que se enamoraba un soldado. El segundo ya era famoso cuando apareció en la segunda temporada de "Verónica Mars", pero Kevin Smith siempre fue uno de los mayores admiradores de esta serie, así que no era raro que le dieran un pequeño cameo. Y en cuanto a los dos buenos mozos del final, eran Clint Eastwood y Tommy Lee Jones dando sus primeros pasos en el cine. Aunque para Eastwood, fue una serie de televisión de vaqueros, "Rawhide", la que empezó a hacerlo despuntar. En el caso de Jones, efectivamente ese fotograma correspondía a "Love Story", y era prácticamente su debut en el cine.

Parece que, aparte de prepararnos para los esperados regresos post-huelga de casi todas las series yanquis, y la aparición de Britney Spears en "Cómo conocí a vuestra madre", esta semana que yo he estado desconectada no ha dado mucho más de sí. Aunque me ha sorprendido leer que David Eick intentará recuperarse de la castaña de "Bionic Woman" haciendo una miniserie sobre "Hijos de los hombres", la película de Alfonso Cuarón que adaptaba un libro de P.D. James que presentaba un futuro bastante negro en el que la humanidad es estéril y ya no puede reproducirse, así que se enfrenta a su extinción total. Por lo que Eick ha comentado, se parecerá bastante más a "Galáctica" que el remake de "La mujer biónica", ya que dice que la serie se centrará más en el origen de la novela, en mostrar una sociedad en la que los jóvenes son el centro de todo y, como no tienen la responsabilidad de cuidar de la próxima generación ni de preocuparse por ella, pueden hacer literalmente lo que quieran.

P.D.: A todo esto, no ha estado mal mi visita a la capital de Hungría y, durante una temporada, la otra capital del Imperio Austro-Húngaro junto con Viena. El frío siberiano de los primeros días ha sido un poco riguroso, pero es realmente imponente y, a la vez, un poco decadente. Merece de veras el apodo de "la perla del Danubio". Y lo único televisivo que vi por allí fueron unos carteles de promoción de la cuarta temporada de "Perdidos" en el metro, con Jack y Kate.

23 marzo 2008

En la galaxia del ciberespacio

Ha llegado el momento de tomarse un respiro, así que la semana que viene podréis descansar de las frikadas y obsesiones macguffineras porque me voy al otro lado de lo que antes se conocía como Telón de Acero. Hasta el próximo fin de semana, os dejaré algunos cosillas para que paséis el rato y, de paso, estrujéis un poco vuestras neuronas teléfilas.

Primero, teniendo en cuenta que estoy en modo cylon hasta que la cuarta temporada de "Galáctica" empiece de una vez, os dejo este curioso vídeo. Es una promoción más que de la serie, de su estupenda música y de su compositor, Bear McCreary, que de vez en cuando cuelga vídeos de ese estilo en su web. No hay spoilers ni nada parecido, sólo unas pocas batallas espaciales, un pequeño vistazo del aspecto de la serie y los taikos marca de la casa. Como sé que algunos estáis empezando a pensar en darle una oportunidad a esta gran serie, ahí tenéis un aperitivo. Como siempre, es cortesía de Galactica Sitrep.



A través de BBoing! he llegado a este vídeo genial sobre la persona que cambió para siempre los títulos de crédito de las películas, Saul Bass. En este caso, es una mezcla muy divertida y lograda del estilo de Bass aplicado a los créditos de "La guerra de las galaxias". Un ejemplo de lo más destacado de su obra puede verse aquí, incluyendo créditos tan famosos como los de "Psicosis", "El hombre del brazo de oro", "Anatomía de un asesinato" o los últimos que hizo para Martin Scorsese, entre ellos los de "Casino".



Y, finalmente, unos pequeños acertijos de actores a punto de hacerse conocidos, cuando no directamente famosos. Por ejemplo, ¿sabríais quién está debajo de esa peluca rubia, y en qué película trabajaba?


Ésta es más fácil, e igualmente divertida. ¿De qué os suena ese barbudo? ¿Y dónde está en este fotograma?

Para terminar, dos tipos bastante fáciles de reconocer muy al principio de sus carreras. ¿Quiénes son? ¿Y a qué vienen semejantes pintas?

Música de la semana: Dado que mi principal ocupación de la próxima semana será el turismo, la selección musical estaba cantada: "Me gusta hacer turismo", de Profesor Popsnugle. Si bien, para ser justos, hay que decir que es una versión del tema principal de "El turismo es un gran invento", comedia típica del desarrollismo de los 60 cuya música está compuesta por Antón García Abril, autor también de "Sor Citroen", "El hombre y la tierra" o "Anillos de oro".

22 marzo 2008

Los Seis de Oceanic

ALERTA SPOILERS: Divaguemos un poco sobre "Perdidos", ¿os parece? Pero apartaos de aquí si no habéis visto el último capítulo, "Meet Kevin Johnson".

Sabemos muchas cosas después de estos primeros ocho episodios de la cuarta temporada de "Perdidos". Sabemos que la isla es un lugar muy poderoso, con sus anomalías electromagnéticas y temporales; sabemos quiénes son los seis supervivientes del Oceanic 815 que logran escapar (Jack, Kate, Hurley, Sayid, Sun y Aaron, el bebé de Claire), y sabemos definitivamente que hay dos bandos peleando, el de Ben, que pretende proteger la isla a cualquier precio, y el de Charles Widmore, que quiere encontrarla cueste lo que cueste. O eso parece, porque uno y otro bando se acusan de ser los malos y de haber preparado el montaje de los restos falsos del avión que se encuentran en una fosa en el océano Índico. Eso todavía está muy embrollado, por lo que es pronto para sacar conclusiones al respecto.

Quedémonos sin embargo con los Seis de Oceanic, y con Michael, cuyo regreso se confirmó por fin esta semana. Desde que Ben habla de que tiene un espía en el barco de Widmore, no es difícil adivinar que era él, y tampoco era difícil adivinar que manipularían sus sentimientos de culpa por haber matado a Ana Lucía y a Libby para que se infiltrara en el barco y saboteara su misión (culpa que se explicita con esas visiones que tiene de Libby). El peaje emocional de los superviventes es común a Michael y a los otros seis que salen de la isla. Su deterioro debe ser cada vez más evidente hasta que terminan como Hurley, que ve a Charlie por todas partes y pide que lo ingresen otra vez en el psiquiátrico, o como Jack, intentando suicidarse. El "peaje" de Kate es cuidar de Aaron, el de Sayid es trabajar para Ben, y el de Sun, por ahora, saber que dejó a Jin atrás. Según han dicho Damon Lindelof y Carlton Cuse, al final de esta temporada, decidirán si vuelven o no a la isla (claro que vuelven, que aún quedan dos temporadas), pero, ¿saben volver? ¿O tendrán que recurrir a Ben?

Hasta el 24 de abril no hay más episodios nuevos (parón forzado por la huelga de guionistas, ya sabéis), y el noveno se llama "The shape of things to come". Bueno, ya sabemos que ésa es Hera, la hija de Sharon y Helo, pero en fin... De momento, el balance de esta primera mitad de la temporada es bastante satisfactorio. Empezó ofreciéndonos unas cuantas respuestas y presentándonos a esos peculiares tripulantes del carguero (mi favorito es Faraday, tan friki él), para después levantar el pie del acelerador e ir colocando las diferentes piezas que nos llevarán hasta el final de temporada. Sigo pensando que la pobre Juliet no llegará viva al final de la serie, y más aún tras confirmar la obsesión que Ben siente por ella, y me intriga el distanciamiento entre Kate y Jack de los flashforwards (aunque ahí sigue habiendo algo).

Por lo pronto, pasemos el rato con unas pocas curiosidades. Por ejemplo, el nombre del capitán del carguero, William Gault, es el de un personaje de varias historias de William Hope Hodgson, precedente para muchos del terror cósmico de Lovecraft (ahora que lo pienso, el pie de cuatro dedos es un poco lovecraftiano... ¡Cthulhu!). ¿Y os habéis fijado que, además, de Patsy Cline, a los chicos de "Perdidos" les encanta Mama Cass? La segunda temporada empezaba con Desmond escuchando "Make your own kind of music", y ahora vemos a Michael estrellando su coche a los compases de "It's getting better". Y, finalmente, sigamos con mi idea fija de todo lo que "Perdidos" tiene en común con "Galáctica", pero hagámoslo con estos montajes realmente simpáticos. No me digáis que Bakunin y el Tigh post-Nueva Caprica no podrían intercambiar sus puestos...

21 marzo 2008

Habrá sangre

1.-Muchos críticos consideran "Sweeney Todd" uno de los mejores musicales escritos por un clásico de Broadway como Stephen Sondheim. Utiliza como base una obra de teatro escrita por Christopher Bond en 1973, que a su vez se inspira en varias historias victorianas sobre el barbero asesino de la calle Fleet y su cómplice, la señora Lovett. La película que Tim Burton ha dirigido sigue el musical de Sondheim y, como tal, es un musical puro y duro, en el que los diálogos se intercalan entre las canciones y éstas llevan el peso de toda la trama. A quien no le vayan estos musicales, probablemente no le convencerá nada este Sweeney Todd que, al mismo tiempo, tiene esa estética y esos personajes torturados y con taras emocionales que tanto le van a Burton. Hay puntos de humor y buenas interpretaciones, con un Johnny Depp muy acertado en la piel de ese barbero cuyo afán de venganza deshumaniza por completo, y con una Helena Bonham-Carter que aporta una ironía sutil y divertida. Y qué decir de la sangre. Hay mucha, corriendo a raudales por todas partes, una sangre muy roja e intencionadamente teatral y de pega.

2.- En "Reaper", más que sangre, lo que corre que se las pela es la guadaña de la cancelación. The CW aún no ha decidido qué hacer con esta serie, que ya puede mantener buena parte de la audiencia que va a herederar de "Smallville" para asegurarse una segunda temporada. Los capítulos nuevos vuelven tras el parón obligado por la huelga (aunque el primero emitido estaba ya grabado con anterioridad), y presentan a Sam con una amenaza potencial quizás peor que el Diablo: su novia, Cady. Cosas maléficas y extrañas pasan a su alrededor, y sólo es cuestión de tiempo que Sam sume dos y dos, o que Josie, la ex-novia de Sock, lo haga, y descubra el pastel. Sigo encontrándola entretenida, sin más pretensiones que hacerte pasar un buen rato, y sigo riéndome con Sock y sus payasadas. Pero me temo que el Diablo se va a encontrar de vuelta en el infierno antes de que llegue el verano, que The CW está ansiosa por cubrir su hueco con más realities de concursos regionales de belleza y granjeros en busca de esposa. Como si no tuvieran suficiente con el de las Pussycat Dolls...

20 marzo 2008

El paraguas amarillo

ALERTA SPOILERS: Creo que no habrá ningún spoiler pero, por si no vais al día con la tercera temporada de "Cómo conocí a vuestra madre", justo es avisaros igualmente.

No te das cuenta de lo que tienes hasta que lo pierdes, y no te das cuenta de todas las bondades de "Cómo conocí a vuestra madre" hasta que te pasas más de tres meses sin ella y, cuando vuelve, es como si te abriera los ojos a otra televisión. Incluso con un episodio normalito como éste. No tiene esos saltos temporales marca de la casa, muy bien utilizados en "The platinum rule" (el último capítulo antes de la huelga de guionistas), pero tiene un par de grandes frases de Robin en el apartamento torcido de Marshall y Lilly ("es como los últimos 20 minutos de 'Titanic'") y un Barney listo otra vez a liar a Ted con cualquier excusa (y con un traje verde que hacía daño a la vista).

Sin embargo, lo más significativo del episodio es, precisamente, el paraguas amarillo. En esta serie, suelen utilizar con mucha inteligencia algunos objetos, como la tuba azul que sirve para conectar el principio y el final de la relación entre Robin y Ted. Este paraguas aparece ya en el primer capítulo de la tercera temporada, en el que nos dicen que pertenece a "la madre", la mujer que es el fin último de la serie. Ha ido apareciendo aquí y allá, en el fondo, y el Ted del futuro que nara la serie ha ido dejando pistas, del tipo "suerte que hice eso, chicos, porque así conocí a vuestra madre". El paraguas tiene una aparición destacada en la fiesta de San Patricio a la que van Ted y Barney, y más todavía cuando el primero regresa al bar al día siguiente para recuperar su móvil y se lleva el paraguas, que han olvidado en el bar, para protegerse de la lluvia.

Ya tenemos la excusa para que Ted conozca a "la madre". Lo que nos lleva a preguntarnos si la serie podría continuar una vez que ambos personajes se conozcan. ¿Podrían amagar con una chica diferente de la que luego termina casándose con Ted? ¿Podría la dinámica de la serie seguir funcionando si se incluye el noviazgo de Ted y esa chica?

19 marzo 2008

Neptune 90210

1.- Seguro que todos habéis leído por ahí la noticia de que el canal The CW va a recuperar "Sensación de vivir" y que Rob Thomas, también conocido como el creador de "Verónica Mars", se va a encargar, por lo menos, de escribir el piloto. Thomas también va a resucitar una vieja serie suya, "Cupid", que tuvo muy poco éxito en la cadena ABC, y va a hacer directamente un remake. Y todo esto a mí sólo me lleva a echar de menos "Verónica Mars". Mucho. Si tenéis curiosidad, el revival de "Sensación de vivir" se explica más aquí.

2.- El proyecto peculiar del día (ya veréis por qué). Finalmente, Sci Fi ha dado luz verde a "Caprica", la precuela de "Galáctica" que Ron Moore y David Eick habían propuesto hace ya bastante tiempo. Lo curioso del caso es que, según Moore, será una cosa tipo "Dallas", co dos familias, los Greystone y los Adama, enfrentadas entre sí por la tecnología que crea a los cylones. Estará ambientada unos 50 años antes de la primera guerra cylon (o eso tengo entendido). Por otro lado, los 9 últimos capítulos de la cuarta temporada de "Galáctica" tienen que rodarse ahora y, con las labores de post-producción, no estarán listos para emitir hasta el otoño, para que calculéis cuánto puede tarde Sci Fi en emitir la segunda parte de la temporada (la primera terminará en junio, más o menos).

3.- Se nota que faltan sólo dos semanas para que regresen nuestros cylones favoritos, ¿eh? Sci Fi va a emitir el día 28 dos especiales, uno que resume toda la serie de la mano de Moore y Eick y otro, llamado "Battlestar Galactica: The phenomenon", que hablará sobre la recepción que crítica y otros actores han dado a la serie desde su comienzo. Si hubiera que recopilar todos los fans declarados de "Galáctica" (que probablemente no salgan en el especial), habría que citar a los creadores de "Cómo conocí a vuestra madre", "The Office" y "South Park", a Quentin Tarantino, Robin Williams, Elizabeth Mitchell, Kevin Smith, Joss Whedon... El primero de ellos, por cierto, puede verse ya aquí.

4.- Y sí, amigos, se demuestra que, salvo en contadas excepciones, las campañas de los fans para recuperar una serie cancelada no suelen servir para nada. Fijaos en "Jericho", a la que toneladas de nueces le dieron una muy corta segunda temporada, pero esas toneladas no se han traducido en millones de espectadores. De ésta no te salva ni un ataque nuclear sobre la CBS.

18 marzo 2008

Romanos en procesión

Las películas de romanos están tan indisolublemente unidas a la Semana Santa televisiva como la Madrugá de Sevilla. Son de romanos pero ambientadas en los últimos días de la Pasión de Cristo, por lo general, y aquí también entran las películas de egipcios, y no siempre relacionadas con la historia de Moisés. Ahí tenemos "Tierra de faraones", de Howard Hawks, que cuenta la construcción de la Gran Pirámide de Keops, o "Sinuhé, el egipcio". Independentemente de su calidad artística, y algunas son muy buenas, lo que une a todas estas películas es una ambientación bastante kitsch y totalmente megalómana (las de Cecil B. DeMille, como "Los diez mandamientos", se llevan la palma en este aspecto), además de tener en su reparto algunos actores que no se sabe muy bien qué hacen allí, como el cara cartón por excelencia Victor Mature, que incluso llegó a ser Sansón (y que tuvo alguna buena aparición fuera del género, en "Pasión de los fuertes", por ejemplo).

La lista de clásicos de Semana Santa es interminable. Está "Ben-Hur", que también puede programarse perfectamente en Navidad, porque empieza con la visita de los Reyes Magos a Belén, si no recuerdo mal; están "Quo Vadis" y "Espartaco" (también en su versión televisiva con Goran "doctor Kovac" Visnjic), y cosas tan sonrojantes como "La túnica sagrada" o "El cáliz de plata", debut oficial en la gran pantalla de Paul Newman con una faldita hipercorta. Está, por supuesto, el clásico por antonomasia, "Rey de reyes", y en versión un poco más subversiva, "La última tentación de Cristo". La cinta que Mel Gibson rodó, en latín y arameo, sobre el tema, "La Pasión de Cristo", va camino de ser una ineludible semanasantera, y creo que este año la veremos en Antena 3.

El maratón de la segunda temporada de "Roma" que va a programar Cuatro se encuadra en esta ola de revival de un tipo de cine que conoció su mejor época en los 50 y los 60, con el auge del Cinemascope y el Technicolor, y luego fue decayendo hasta caer en el olvido. Es una pena que, ya que estamos con las crucifixiones, nadie se atreva a programar "La vida de Brian", pero incluso en todos estos peplums hay momentos para la diversión, a veces un poco malvada. Podemos jugar a contar cuántas veces vemos a Charlton Heston en estas películas, a cachondearnos de los modelitos de los actores, principalmente, a disfrutar del evidente doble sentido de la famosa (y censurada) escena de las ostras y los caracoles en "Espartaco" o del también evidente, y sutil, subtexto gay de casi todas las escenas entre Judah y Messala en "Ben-Hur", y muy especialmente su reencuentro tras años de separación.

A ese respecto hay una historia muy divertida, nunca confirmada por Heston, que cuenta Gore Vidal, uno de los guionistas que participó en el proyecto. Vidal afirma que, para justificar mejor el encarnizamiento con el que Messala persigue a su amigo de la infancia, le sugirió al director, William Wyler, que Messala y Ben-Hur habían sido amantes de jóvenes. Al volver a encontrarse, el romano quería retomar la relación, a lo que Judah no se mostraba interesado, y de ahí su despecho. Según Vidal, Wyler dio indicaciones a Stephen Boyd, que interpretaba a Messala, para que incorporara ese matiz en su actuación, pero sin decirle nada a Heston y siempre de forma muy sutil, pues la censura nunca habría permitido semejante "aberración". Ahora sí, dicho todo esto, la que yo quiero que vuelvan a programar es "Jasón y los argonautas", pero como es de griegos...

P.D.: No tiene nada que ver, pero mi frikismo es superior a mí. Vaya pedazo de anuncios de la cuarta temporada de "Galáctica" hay en Los Ángeles, todos con la ya famosa foto tipo "La última cena" de Entertainment Weekly (la versión original de la revista, más algunos spoilers de Ron Moore, podéis verlos aquí). La foto de abajo es de este fan.

17 marzo 2008

La plaga

La medida de Anton Chigurh, el frío y despiadado asesino de "No es país para viejos", la da Carson Wells, otro asesino a sueldo, cuando le preguntan cómo de malvado es Chigurh: "¿Comparado con qué? ¿Con la peste bubónica?". El asesino del corte de pelo a lo Príncipe de Beukelaer y el arma de aire comprimido para matar reses es una verdadera plaga que desciende sobre el condado texano donde el personaje de Tommy Lee Jones es el sheriff desde hace años, lo mismo que lo fue su padre, un sheriff que pertenece a otra época y que siente que el mundo le ha pasado por encima.

Aunque la película siga la persecución que sufre Llewellyn Moss al quedarse con dos millones de dólares que encuentra en el desierto, son Chigurh y el sheriff los verdaderos protagonistas de la película; uno por representar la violencia y la maldad sin ningún tipo de justificación, y el otro por mostrar a un hombre que intenta mantener su integridad en un mundo que no comprende, y que le horroriza.

Aunque no sea la mejor película de los hermanos Coen, no puede negar que ellos son los responsables, con sus toques de humor macabro (vaya fauna de recepcionistas...), la escena del reconocimiento de la escena del crimen, que parece "Fargo" en el desierto, y esos personajes en los que ninguno dice ni una sola palabra de más. Hay muy poco diálogo en la película y todo se cuenta en imágenes, con unos sensacionales y muy westernianos planos del desierto de Texas. El ritmo, por eso, puede resultarle lento a algunos espectadores, pero es el más eficaz para que seamos conscientes de la crueldad y la violencia no sólo de Chigurh, si no de toda la situación en la que se ve envuelto Moss.

Javier Bardem está realmente estupendo. Transmite la desconexión de Chigurh de todo lo que le rodea, su lógica extraña, su maldad, y todo lo hace con una mirada entre extraviada e intensa y una economía de gestos y de movimientos. Sólo su silueta ya es sinónimo de peligro. El resto del reparto no le desmerece en absoluto, y Tommy Lee Jones sigue dando lecciones de presencia. Por cierto, que medio reparto de "No es país para viejos" aparece también en "En el valle de Elah", incluyendo al propio Lee Jones, Josh Brolin y Barry Corbin. ¿Es que había un dos por uno, o algo así?

P.D.: La conexión con "Perdidos" de la foto de la entrada de ayer es sencilla (y cuidado, que hay spoilers): el jugador de los Phoenix Suns es Kevin Johnson, igual que el alias de Michael en el barco de Charles Widmore. Johnson está considerado uno de los mejores bases de la NBA, y formaba una pareja de muchos quilates con Charles Barkley, con el que llegó a unas finales de la NBA en 1993. Lástima que enfrente estuvieran los Chicago Bulls de Michael Jordan. Hagamos apuestas. ¿Aparecerá el Gordo Barkley en "Perdidos"? ¿Lo hará Dan Majerle?

16 marzo 2008

El lado oscuro

Adaptaciones de "El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde" hay muchas. El libro de Robert Louis Stevenson, publicado en 1886, tuvo un éxito inmediato, que se tradujo rápidamente en obras de teatro y, en cuanto apareció el cine, en películas. La primera de todas ellas es de 1908, si Internet Movie Database no falla, aunque tal vez las más conocidas son la dirigida por Rouben Mamoulian en 1931, protagonizada por Fredric March, y por supuesto la de Victor Fleming, en 1941, con un reparto estelar formado por Spencer Tracy, Ingrid Bergman y Lana Turner. Incluso Hulk está inspirado por la dualidad entre el bien y el mal del torturado doctor, apocado y serio como Jekyll, y una fuerza malvada de la naturaleza como Hyde (si nos quedamos en un ejemplo más cercano, heredera suya es también Niki, de "Héroes").

El año pasado, la BBC emitió una nueva encarnación de esta historia (escrita, por cierto, por Steven Moffat, responsable de los mejores capítulos de "Doctor Who"), protagonizada por el doctor Tom Jackman y sus extrañas transformaciones surgidas de repente, sin que medie la ingesta de una poción, como ocurría en el libro de Stevenson, pero que parecen conectadas a una investigación que realizaba en la universidad donde trabajaba. Jackman parece tenerlo todo bajo control, separando a su familia y su ordenada vida del desenfreno y la locura de Hyde, al que trata como si fuera una persona totalmente diferente y con el que se comunica mediante una pequeña grabadora digital. Por supuesto, ese control es sólo un espejismo, y el lado oscura del doctor enseguida empezará a maniobrar para intentar hacerse con el control total de su persona.

¿Es Jackman un caso de desdoblamiento de personalidad? En el piloto no queda claro y, de hecho, quien ve a Jackman y a Hyde está convencido de que Hyde es otra persona diferente, más seguro, incluso más alto que su alter ego. Por supuesto, la intriga está en averiguar por qué a Jackman le ocurren estas transformaciones, y cuál de sus dos lados terminará prevaleciendo. Y resulta muy interesante, y entretenido de ver, por el actor que da vida al pobre Jackman, James Nesbitt, un tipo que se transforma en Hyde adoptando un lenguaje corporal y una entonación en la voz diferentes, sin necesidad de más maquillaje que unas lentillas que oscurecen sus ojos y los inyectan en sangre. Es impresionante ver a Nesbitt en acción, un buen actor cuyo trabajo en "Jekyll" le reportó este año una nominación a los Globos de Oro, y que empezó a despuntar por su trabajo en "Bloody Sunday", de Paul Greengrass. Junto a él, y como curiosidad, está Michelle Ryan antes de fracasar en "Bionic Woman", y he de decir que aguanta el tipo frente a Nesbitt bastante bien.

P.D.: Ya sé que "88 minutos" no tiene buena pinta, ¿pero habéis distinguido a todos esos actores televisivos en su trailer? Si no me olvido a ninguno, están Neal McDonough, Benjamin McKenzie, Amy Brenneman y Leah Cairns. Y, ya puestos, ahí os lanzo otro reto sencillo. ¿Qué tienen que ver esta foto y "Perdidos"?

Música de la semana: "Cómo conocí a vuestra madre" vuelve, por fin, mañana, después de estar otra vez en la cuerda floja y tenernos a todos angustiados hasta que consiguió su renovación para la próxima temporada, y tras el revuelo montado al saberse que Britney Spears tendría un cameo en un episodio. Por lo pronto, el capítulo de mañana está ambientado en las celebraciones del día de San Patricio y se llama "No tomorrow", como esta canción de Orson.

15 marzo 2008

Un freak show y una biblioteca

1.- ¿Tienen los de "Perdidos" algún tipo de acuerdo con CBS para utilizar, en personajes secundarios, a actores de sus series? Naomi (Marsha Thomason) y el Dr. Hamill (James Lesure), que aparece en el final de la tercera temporada, salían en "Las Vegas", Richard Alpert (Néstor Carbonell) se ha visto esta temporada en "Cane" y, entre los personajes de la tripulación del barco, tenemos a un médico que es ni más ni menos que Eckley (Marc Vann), el supervisor con el que Grissom siempre tiene alguna polémica que otra en "CSI". Esta semana, además, por fin hemos visto, aunque brevemente, a Regina, interpretada por Zoe Bell, doble de acción de Uma Thurman en "Kill Bill" y de Lucy Lawless en "Xena", que aparecía en "Death proof", el segmento de Tarantino de "Grindhouse", y brevemente también en "Planet terror", por la que se paseaba Naveen Andrews (Sayid).

2.- Una feria un poquito siniestra que sólo actúa de noche y va dejando un rastro de miedo de pueblo en pueblo... Podría haber sido uno de los capítulos del "Monstruo de la Semana" de "Expediente X", o un resumen apresurado de "Carnivale", o el argumento de "La feria de las tinieblas", de Ray Bradbury, pero es el punto de partida del episodio de esta semana de "Torchwood", que cada vez me recuerda más a la creación de Chris Carter. Esta semana, además, conocemos un aspecto bastante curioso del pasado de Jack que juega un papel determinante para la resolución de la trama.

3
.- Permitidme que vuelva sobre "Perdidos", en esta ocasión, sobre los últimos libros que han aparecido en la serie, libros muy poco habituales para la ficción estadoundense (y para cualquiera, ya puestos): "La invención de Morel", de Adolfo Bioy Casares, "Valis", de Philip K. Dick y "El Chancellor", de Julio Verne, que es el libro que Regina está leyendo al revés. Algunos títulos de capítulos hacen referencia a obras sobre todo de ciencia ficción, desde los grandes clásicos (como "Alicia en el País de las Maravillas") al género pulp: "Trampa 22", de Joseph Heller, "Forastero en tierra extraña", de Robert Heinlein o "Historia de dos ciudades", de Charles Dickens. La lista es muy larga, y cada vez se amplía más.

4.- MacGuffin ha dado el salto a las ondas radiofónicas acompañada de otros tres blogueros televisivos. Es una radio local y a nosotros se nos va un poco la olla, pero es divertido. En Mi caja tonta explican todo el asunto a la perfección, y hasta ofrecen la posibilidad de escucharnos, si os atrevéis.

5.- En Estados Unidos ya se ha estrenado la nueva película de Al Pacino, "88 minutos". Dejando de lado su argumento (un thriller con un asesino psicópata), os propongo un pequeño jueguecito. ¿Cuántos actores televisivos sois capaces de reconocer en el trailer? Ya os adelanto que no son pocos, y hay una un poco escurridiza de distinguir.

14 marzo 2008

Cara de palo

No hace mucho, un crítico estadounidense (no recuerdo quién) hablaba del auge de la comedia dead pan, o lo que es lo mismo, aquélla en la que los personajes sueltan sus chistes y todo tipo de burradas con cara seria y, a veces, incluso aburrida. Ponía como ejemplo más claro la serie "Flight of The Conchords", en la que Jemaine y Bret no mueven ni un músculo de la cara en medio de diálogos para besugos y canciones divertidísimas, y apuntaba también a algunos personajes de las comedias de Wes Anderson y, por supuesto, a Bill Murray, que mostró el valor cómico de una buena cara de palo en "Atrapado en el tiempo".

Tal vez sea una reacción a la hipergestualidad y el histrionismo de Jim Carrey y Chris Tucker ("Hora punta"), que estuvieron ampliamente representados a principios de la década, o simplemente es que ahora hay más talento, o más gente con éxito, en el lado de los "caras de palo". Claro que, para triunfar en ese apartado, hay que tener una cara especial. Si no, buscad en YouTube cualquier actuación en Enrique San Francisco en "El club de la comedia"... No le hacía falta ni hablar.

Hay ciertos temas, y ciertos actores, que resultan muy divertidos siendo totalmente serios. A Buster Keaton, el "cara de palo" por antonomasia, no podemos incluirlo aquí porque lo suyo fue el cine mudo y los gags visuales (muchos de ellos insuperables incluso hoy en día).

13 marzo 2008

Las nueve vidas de Urgencias

¿El County General sigue abierto? ¿Después de tanto tiempo? ¿Pero queda alguien trabajando allí? Son todo preguntas perfectamente válidas al enfrentarnos a uno de los dramas más longevos de la televisión estadounidense, "Urgencias". Lo son no sólo porque va a enfrentarse a su 15º temporada en otoño, sino porque ha sobrevivido a un par de coma hipoglucémicos y ataques al corazón que a punto estuvieron de hacerla fallecer. Su 12º temporada fue discreta, siendo generosos, y la NBC decidió que era hora de que los médicos del County General se fueran de vacaciones indefinidamente, lo que ocurriría cuando la ficción cumpliera 14 años en antena.

Pero hete aquí que la que iba a ser la penúltima entrega, la 13ª, empezó a funcionar muy bien en audiencia y, sobre todo, en esa franja de edad entre los 18 y los 49 años que es la panacea universal para cualquier serie de salud delicada, así que se suspendió por el momento la decisión de imponer un final a "Urgencias". El tiempo no espera por nadie, que decían los Rolling Stones, y finalmente será la 15º temporada la que marque el cierre del hospital más famoso de Chicago. Para ella, además, los productores quieren tirar la casa por la ventana y traer de vuelta a algunos de los actores que han pasado por la serie, como George Clooney, Julianna Margulies (que tiene serie nueva, "Canterbury's law") o Noah Wyle, que está ya confirmado para volver a enfundarse la bata del doctor Carter.

"Urgencias" no fue la primera serie de hospitales en la que la vida personal de los médicos se entremezclaba con las historias de los pacientes, pero es una de las que mejor ha llevado a cabo esa mezcla. En 1994 revolucionó la parrilla televisiva con su ritmo acelerado, su humor un poco negro (me encantaban esos vagabundos borrachos que se peleaban con las enfermeras cuando iban a bañarlos) y sus personajes hechos un desastre. Desde el intento de suicio de Carol Hathaway con el que se abría la serie, quedaba claro que no estábamos ante "Hospital General". Series posteriores como "Anatomía de Grey" le deben mucho a la creación de Michael Crichton, que acabó siendo la vencedora del duelo médico que sostuvieron la NBC y la CBS con "Urgencias" y "Chicago Hope". Por ella ha pasado una ingente cantidad de actores, famosos y en camino de serlo, y ha ido envejeciendo con bastante dignidad.

La pena, como siempre, es lo mal que TVE la ha tratado en España. Ni siquiera la primera temporada se libró de ir programada a partir de las 23 de la noche, y el desbarajuste de los últimos años es totalmente esquizofrénico. Quien tenga AXN puede ir siguiéndola con cierto orden, aunque con retraso.

12 marzo 2008

Los Cinco Últimos

ALERTA SPOILERS: Como "Galáctica" no es una serie histórica, sí que puede haber cosas que, si no seguís la serie a su ritmo de emisión, desconocéis y preferís no saber. Avisados quedáis.



Los androides, robots con apariencia humana, nunca faltan en la ciencia ficción, y menos aún si quiere plantearnos cuestiones tan complicadas como qué es lo que nos hace humanos. ¿El pensamiento? ¿Las emociones? ¿La imprevisibilidad? ¿La crueldad? ¿Todo a la vez? En "The Sarah Connor Chronicles", la serie de Fox dentro de la saga de Terminator, el modelo asignado para la protección de Sarah y su hijo John, Cameron, parece tener unos pequeños detalles más humanizados (detalles que el productor ejecutivo explica aquí) que la emparentan con los replicantes y, por supuesto, con nuestros queridos cylones.

Hace algún tiempo divagamos un poco sobre el posible futuro de Starbuck en la temporada final de "Galáctica", pero hay otra cuestión tan interesante, o más, que puede estar ligada con ese destino de Kara Thrace y que, desde luego, será crucial en el desenlace: los Cinco Últimos Cylones. Desde la miniserie, sabemos que hay 12 modelos humanos de cylones, de los que conocemos a siete: Cavil (el "hermano" expeditivo y sarcástico), Simon (el científico), Leoben (el místico), Aaron Doral (5, una especie de líder), D'Anna (o número 3, con su propia agenda), Boomer (el número 8, que no sabe que hacer con su vida) y la única sin un único nombre, Seis, que es también uno de los modelos más complejos por la fascinación que siente por las emociones humanas y, especialmente, por el amor. Los otros 5 modelos se mencionaron de pasada alguna vez; Seis le dice a Baltar que los cylones nunca hablan de ellos, no saben quiénes son y que los dos grupos siguieron caminos separados mucho tiempo atrás.

En la tercera temporada, los Cinco Cylones Finales empiezan a adquirir más protagonismo. Tres descubre que, entre la muerte y el proceso de descarga en otro cuerpo, puede ver sombras que parecen sus caras, y se obsesiona con descubrir sus identidades, algo que logra finalmente en el Ojo de Júpiter (aunque le cuesta ser encajonada, o como se traduzca "boxed"). Los Cinco están ligados con el camino a la Tierra, pues el Ojo es un faro que apunta la dirección a seguir, y se encuentra en un lugar llamado el Templo de los Cinco. Además, cuatro de ellos descubren sus verdaderas identidades con la flota más cerca que nunca de su destino, y gracias a una canción tan terrestre como "All along the watchtower".

Sin embargo, especular sobre la identidad del quinto y último y la razón de ser de los Cinco Finales es más difícil que adivinar la verdadera naturaleza de Starbuck (empieza por "h"...). En "Razor" parece que se nos da alguna pista de su origen al introducir la historia del Primer Híbrido y el laboratorio gore y macabro que Adama encuentra en la primera guerra cylon, pero seguimos a oscuras sobre las razones por las que los Cinco se mezclaron con los humanos, hasta el punto de ignorar su verdadera identidad, y se separaron de los demás cylones. Teniendo en cuenta que éstos van a diverger cada vez más en sus planes hacia los humanos (ahí parece que entra un nuevo modelo de Seis llamado Natalie), lo que de verdad promete es el anunciado regreso de Tres. Ella sabe muchas cosas, entre ellas, quién es el Último Cylon.

¿Apuestas? No es fácil. Tiene que se otro "humano" muy involucrado en la causa, como lo están Tigh, Anders, Tyrol y Tory, que fueron todos líderes de la resistencia en Nueva Caprica. Sin embargo, y aunque Ron Moore dice que han ido dejando algunas pistas (es de suponer que serán más evidentes en la nueva temporada), yo no tengp ni la más remota idea. Estaría bien que fuera el doctor Cottle... What the frak... ¡Que sea Cottle!

P.D.: La culpa de estas divagaciones la tienen estas dos entradas sobre robots. Y mi favorito también es Bender. ¡Binary solo!.

11 marzo 2008

La sangre del César

Julio César fue asesinado en Cuatro hace más de un año, que es lo que la cadena va a tardar en estrenar la temporada final de "Roma". Además, se la va a quitar de encima con una programación maratoniana en Semana Santa, liquidándose los 10 capítulos entre el Jueves y el Sábado Santo. Ni la serie de la HBO se libra de encuadrarse en esa tradición televisiva de programar peplums en esta época del año. Pero no me malinterpretéis. "Roma" es un peplum simplemente porque es de romanos, pero está más cerca de "Deadwood" que de "La túnica sagrada", impulsada por ese mismo aliento verista, con personajes creíbles y contradictorios y con una ambientación histórica muy cuidada.

Los elevados costes de producción forzaron que la serie sólo tuviera dos temporadas y que, además, el rodaje de la segunda se demorara durante meses. Quien ya ha podido ver esos episodios finales afirma que están a la altura de los 12 (¿fueron 12?) primeros, que finalizaron con el asesinato de César. Ahora, es Marco Antonio el que gobierna Roma en un triunvirato que, como no podía ser de otra manera, desemboca en una guerra civil, y al mismo tiempo tenemos a Octavio dando sus primeros pasos hacia el futuro emperador Octavio Augusto. Sabemos de sobra cómo termina todo, pero ver el camino hacia ese final sigue siendo apasionante, sobre todo por el gran hallazgo que es contarlo todo desde el punto de vista de esos personajes a pie de página de la Historia que, aunque no la hacen, sí la sufren y deben desenvolverse en ella como buenamente pueden; en este caso, los legionarios Tito Pullo y Lucio Voreno (dos personajes reales citados por Julio César en "Comentarios sobre la guerra de las Galias").

El principio de la segunda temporada los verá en situaciones opuestas a las que tenían en el arranque de la serie, y ahora Pullo parece ser el hombre razonable de los dos. Las aventuras de estos dos sirven para mostrarnos cómo era la vida cotidiana en la Roma antigua, una faceta que se ve también en el quehacer y las intrigas de las dos grandes manipuladores y villanas de la serie, Atia y Servilia (yo soy más Team Atia, la veo con más clase y más estilo de malvada a lo "Dinastía"). Después de conspirar para matar a César, el futuro de Servilia no es muy halagüeño, y seguro que el tira y afloja entre las dos seguirá siendo de lo más entretenido, más aún que el hijo de Atia tiene todas las papeletas para convertirse en el Emperador. Esto es una ficción de romanos, y no "Gladiator".

10 marzo 2008

Lejos del mundanal ruido

Un grupo reducido de personajes atrapados en un pequeño espacio en medio de un ambiente hostil da mucho juego, y el cine de terror y ciencia ficción sabe mucho de eso. Las tormentas de nieve en la Antártida de "El enigma de otro mundo" y su remake, "La cosa"; el espacio exterior y la nave claustrofóbica de "Alien", incluso el siniestro hotel en medio de la montaña de "El resplandor"... Todos son lugares aislados en los que quedarse atrapado nunca es sinónimo de nada bueno, incluso si no te acecha ningún ente extraterrestre ni nadie de tu grupo se vuelve loco.

Hace poco, vi un capítulo de la segunda temporada de "Doctor Who" que tocaba, precisamente, ese tema, sólo que el escenario era un pelín más extremo, porque el Doctor y Rose llegan a una base científica en un planeta situado en la órbita de un agujero negro, por lo que teóricamente sería un planeta imposible. Por supuesto, estaban los científicos de la base que van cayendo uno a uno, como mandan los cánones en este tipo de historias, y la introducción de todo el episodio, además de mostrar su evidente herencia con "La cosa", recordaba también a dos capítulos de "Expediente X" que apostaron por la misma situación. El primero, "Hielo", bebía más directamente de la película de John Carpenter, con Mulder y Scully encerrados en una estación científica en medio del Ártico. El segundo, "Firewalker", cambiaba el escenario al interior de un volcán, pero no había mucha más diferencia (a mí me gusta más "Hielo", en el que la claustrofobia y la paranoia están más logradas, aunque en el segundo salga Bradley Whitford).

En la última película de Danny Boyle, "Sunshine", la sensación de aislamiento estaba también muy lograda, hasta el punto que podías creerte perfectamente que la cercanía del Sol trastorne a los astronautas. De hecho, el derrumbe psicológico de los personajes era más interesante que la opción del acechador a lo "Depredador" (otra de este estilo, pero en la selva), pero es más difícil de sostener a lo largo de toda la película. La amenaza extraterrestre debe ser un clásico en estos casos, igual que la del psicópata, porque convierte la situación en una carrera por la supervivencia. Si cualquier puede ser el asesino, ya tenemos servida la paranoia y la desconfianza, y lo peor d todos saldrá a relucir.

09 marzo 2008

Día de elecciones

En España no se estila mucho eso de incluir unas elecciones en una serie (igual en "Cuéntame cómo pasó", por aquello de que eran las primeras). Seguramente, enseguida empezarían a acusar a dicha serie de partidista, de estar dirigida por algún partido político, lo que fuera, perdiéndose la tensión y la emoción que puede tener un capítulo ambientado en un día de votaciones.

Incluso las elecciones a alcalde en un pueblo tan pequeño como Cicely pueden dar para mucho, sobre todo si de repente aparece un candidato que intenta arrebatarle al puesto a Holling sólo para tener una señal de "Stop" (¿o era un semáforo?) en la carretera que pasa por delante de su casa. Lo mejor de ese capítulo de "Doctor en Alaska", sin embargo, era Chris, que por sus antecedentes criminales no puede votar pero el día de las elecciones se afeita, se corta el pelo y se pone su mejor traje (o el único) para ir al colegio electoral y disfrutar del ambiente (y de las banderolas y la comida de O'Connell). Sus palabras para anunciar las elecciones son clásicas: "Amigos, romanos, votantes registrados, prestadme vuestras orejas. Holling Vincoeur ha recogido el guante arrojado por Edna Hancock. Tenemos una carrera por la alcaldía, amigos, a lo que yo sólo puedo añadir alea iacta est, la suerte está echada, la batalla está en marcha, agarraos a vuestros sombreros, Cicely. Estamos a punto de ser testigos de ese rito sagrado por el que todos y cada uno de nosotros nos convertimos en acólitos delante del altar de la urna, nuestro altar profano. Amigos cicelianos, mi corazón late fuerte, bailando al compás del pueblo libre, la ciudad en una colina, e pluribus unum. Me siento como Whitman, pastor de los marginados: Oh, democracia. A tu lado, la garganta se inflama y canta alegremente".

Por supuesto, los fans de "El ala oeste de la Casa Blanca" han vivido todo tipo de votaciones, primarias y elecciones presidenciales a lo largo de las siete temporadas en las que se mantuvo en antena. Ya comentamos que las primarias que se mostraban en la séptima guardaban un sorprendente parecido con las que demócratas y republicanos están viviendo ahora en EE.UU. Pero es que, hace poco, leí que ese parecido no era casual, porque los guionistas utilizaron realmente a Barack Obama como inspiración para construir a Matt Santos. El senador por Illinois empezó a destacar con la intervención que abría la convención demócrata de 2004, en la que se eligió a John Kerry como candidato del partido para las elecciones presidenciales de ese otoño, y justo fue esa intervención la que hizo que el equipo de "El ala oeste..." se fijara en él. El resto, como se suele decir, es historia.

¿Y la papeleta de la foto? Es una de las papeletas reales que se emplearon en la segunda temporada de "Galáctica", durante las elecciones presidenciales que enfrentaron a Laura Roslin y Gaius Baltar. La consiguió un fan antes de que se emitieran esos capítulos, y el nivel de detalle es de lo más curioso. La tensión en esta historia estaba más en si Roslin estaba dispuesta a lo que fuera con tal de evitar que Baltar se convirtiera en el nuevo presidente, más aún después de recordar haberlo visto en Caprica con Seis, pero a estas elecciones no les faltó de nada. Empezaron a forjarse en la primera temporada, con aquella bravata de Tom Zarek y la elección de los representates de las Colonias que debían formar el Quorum, y después tuvieron un candidato sorpresa (el propio Baltar), debates, todo tipo de triquiñuelas y, finalmente, hasta un pucherazo. Todo para que, al final, los invadan los cylones de nuevo.

Música de la semana: En la K-OSO, las selecciones musicales de Chris eran siempre peculiares y curiosas, y casi siempre eran viejos éxitos. Como oldie es esa canción que Fleischmann y O'Connell bailan al final de aquel hilarante episodio en el que a Rick, el novio de Maggie le cae un encima un satélite. Joel elige en la jukebox "At last", de Etta James, y convence a Maggie de esta manera: "Si no bailas conmigo, O'Connell, ¿sabes lo que estás haciendo? Le estás dando la espalda a la razón, a la lucha del hombre por salir del barrizal de la ignorancia y la superstición. Estás diciendo 'sí' a la caza de brujas y la Inquisición, estás dando un portazo a la Ilustración y estás invitando a que vuelva la Edad Oscura. No estoy haciendo esto por tí, O'Connell, lo hago por la civilización. ¿Qué dices? ¿Por favor?".

08 marzo 2008

Un pelotón de fusilamiento

En la facultad de Periodismo te pasas años perfeccionando la reescritura de noticias. Me explico. Te dan unas notas de prensa o unos despachos de agencia, y lo que tú tienes que hacer es escribir lo que se cuenta en esas notas de otra manera. Por ejemplo, si tienes este principio de una noticia de EFE que dice "la Policía Nacional ha detenido a 24 personas por delitos contra la propiedad intelectual en una operación contra la instalación de software pirata en establecimientos comerciales de informática, en la que han sido investigadas 14 empresas" (y es un despacho real de hoy, 8 de marzo), tú tendrías que hacer algo parecido a esto: "24 personas han sido detenidas por la Policía Nacional por instalar software pirata en tiendas de informática. Las detenciones han tenido lugar en el marco de una operación por delitos contra la propiedad intelectual en la que se investigó a 14 empresas de toda España". No es demasiado diferente, pero sí lo suficiente para que, si lo firmas con tu nombre, no quedes como un aprovechado que plagia los despachos de EFE y tiene el cuajo de firmarlos. En ese caso, lo que estás haciendo se denomina "fusilar".

Hace unos años, el diario The New York Times se vio envuelto en un escándalo mayúsculo cuando se descubrió que uno de sus redactores más prometedores, Jayson Blair, había plagiado e inventado muchas de las noticias que había publicado en el diario, incluyendo algunas que habían aparecido en la primera página. Blair estaba en la cresta de la ola, cubriendo desde aquel famoso caso del francotirador de Washington hasta la guerra de Irak Sus historias estaban llenas de errores e inexactitudes, y aunque sus jefes decidieron vigilar más de cerca lo que escribía, siguieron dándole cancha. Hasta que, en abril de 2003, una periodista del San Antonio Express-News contactó con el jefe de Blair para pedirle explicaciones por una noticia que él le había copiado. Y se descubrió todo el pastel. Más o menos por la misma época se estrenó la película "El precio de la verdad", en la que Hayden Christensen interpretaba la historia real de Stephen Glass, un periodista de la revista The New Republic que se había inventado gran parte de sus artículos. La cinta seguía no sólo a Glass, sino a su editor Charles Lane en su investigación por averiguar qué estaba pasando realmente, y es un título bastante recomendable e interesante, que lanzó definitivamente la carrera de Peter Sarsgaard.

Desde que los blogs han proliferado por Internet como las setas en un bosque otoñal, los fusilamientos más o menos descarados se han convertido en una costumbre poco edificante. Hay quien copia entradas enteras y añade al final un enlace a la fuente, lo que es de agradecer, y hay quien coge un poquito de aquí, otro poquito de allá y otro poquito de más allá y se cocina una entrada la mar de maja demostrando su habilidad con el corto-pego. A los periodistas se les dice que deben citar sus fuentes no sólo para verificar su información, y porque es ético reconocer de dónde la has sacado, sino también para cubrirse las espaldas si algo sale mal. ¿Están los blogueros exentos de esto? Juzgad vosotros mismos en Yo no me aburro (donde se descubrió el último caso de fusilamiento interneteril) y en ByTheWay. Ellas explican muy bien de qué va el tema.

07 marzo 2008

La academia Hogwarts de actores

Lo hemos comentado con anterioridad, pero no deja ser curiosa la enorme cantidad de talento interpretativo británico que hay en la saga de películas de Harry Potter. Cuando J.K. Rowling vendió finalmente los derechos de la adaptación al cine a Warner, puso como condición que el reparto debía ser británico, y los productores han cumplido empleando a leyendas como John Hurt, Maggie Smith y Richard Harris (cuyo último papel fue, precisamente, el de Albus Dumbledore) , y también descubriendo a nuevos talentos, y no sólo entre los protagonistas.

Ha pasado tanta gente por Hogwarts (y lo que queda en las dos últimas películas) , que esto no puede más que ser un breve recordatorio de gente cuya presencia en esos títulos me parece curiosa. No voy a incluir a mi favorito, Alan Rickman, un Snape inquietante, irónico y misterioso.

Barty Crouch, el hijo mortífago del Ministro de Magia, aparecía brevemente en "El Cáliz de Fuego", y lo realmente curioso es que su intérprete, David Tennant, ahora es famosísimo en el Reino Unido gracias a su protagonismo en "Doctor Who", y él incluso se va a atrever con "Hamlet" en el teatro.

Todavía no me explico cómo consiguieron convencer a Julie Christie para que fuera Madame Rosmerta en "El prisionero de Azkaban", teniendo en cuenta lo poco que trabaja últimamente. Lo último que se ha visto de ella es el debut en la dirección de Sarah Polley, "Lejos de ella", por la que estuvo nominada al Oscar.

La entrometida e insportable periodista Rita Skeeter adquirió en "El Cáliz de Fuego" los rasgos de Miranda Richardson, que acaba de terminar "The young Victoria", una película sobre los primeros años en el trono de la reina Victoria, a la que da vida Emily Blunt.

La profesora de Adivinación, Sybil Trelawney, sólo ha hecho una profecía en toda su vida, y una bastante importante, además. A Emma Thompson no se le cayeron los anillos para cascarse las gafas a lo Barragán y la peluca de la pitonisa Lola que lleva la Trelawney en "El prisionero de Azkaban".

Ya sé que faltan muchos, como la gran Dolores Umbridge de Imelda Staunton en "La Orden del Fénix", pero no hay sitio para todos. Eso sí, pueden presumir de contar con un impresionante ramillete de actores oscarizados. Maggie Smith (McGonagall) tiene dos, los mismos que Emma Thompson (aunque el último fue por el guión de "Sentido y sensibilidad"), Julie Christie se llevó uno en los 60, y tanto Ralph Fiennes (Voldemort) como Helena Bonham-Carter (Bellatrix), John Hurt (Ollivander), Richard Harris (el primer Voldemort Dumbledore, vaya despiste), Imelda Staunton y Julie Walters (la señora Weasley) han estado nominados al premio de la Academia de Hollywood.

06 marzo 2008

El asesinato como una de las bellas artes

Los asesinos en serie de las series y las películas cada vez son más particulares, y por particular nos referimos a personales, diferentes, únicos. Ya no basta con que sean mentes brillantes y elijan a sus víctimas al completo azar o, como mucho, porque todas son rubias; ahora, además, deben dejar unas firmas elaboradas que griten a los cuatro vientos que esa muerte es obra de ellos, y de nadie más. Títulos con policías que persiguen a asesinos en serie hay muchos. La única manera de diferenciarlos unos de otros es teniendo un asesino original.

Desde "El estrangulador de Boston" y "Frenesí" ha llovido mucho, y es lógico que el género haya ido cambiando. El impulso que le dio "El silencio de los corderos" a principios de los 90 hizo que por todas partes hubiera asesinos de este estilo, desde los que copian crímenes famosos ("Copycat") a los que firman con cartas de póker (ése es de un libro, "La jota de corazones", uno de los mejores de los protagonizados por la forense Kay Scarpetta) o los que se creen Casanova ("El coleccionista de amantes"). La "onda expansiva" incluso llegó a la tele, y ahí está el equipo de "Mentes criminales" para demostrarlo (y "Profiler", en versión un poco más paranormal, antes que ellos).

En los últimos tiempos, el más original es "Dexter", que en su primera temporada persigue a un tipo que extrae toda la sangre de sus víctimas antes de descuartizarlas y que está obsesionado con él. A la vez, el propio Dexter es un matarife, sólo que él únicamente mata a criminales que se han ido de rositas de sus crímenes. El Asesino del Camión Frigorífico es una vuelta de tuerca bastante malsana a este género, una vuelta parecida a la que dio el villano de "Seven" en el cine de los 90 al matar siguiendo los siete pecados capitales. Y ya puestos a rizar el rizo, el Asesino de las Miniaturas que anima la séptima temporada de "CSI" es de premio. Su primera obra aparece al final del primer capítulo, con una reproducción exacta de la escena del crimen verdaderamente escalofriante. No será la primera vez que Grissom se enfrente a un asesino en serie demasiado inteligente (uno recurrente fue aquel tipo que hacía pasar por suicidios en una bañera vacía la muerte de hombres blancos de mediana edad, con nota y todo), pero éste tiene pinta de llevarse la palma. Veremos por dónde va el tema.

P.D.: Se me olvidó resolver ayer el pequeño enigma de "Then he kissed me", canción de The Crystals que suene en bastantes películas. Es cierto que se escuchaba en "Uno de los nuestros", en un plano secuencia magistral, pero la aparición realmente mítica es al principio de "Aventuras en la gran ciudad", con Elisabeth Shue bailando y cantando por toda la habitación esperando a que llegue a recogerla Bradley Whitford.